Hace unas pocas horas se anunció oficialmente el nacimiento de Sasha Piqué Mebarak, hijo de Shakira y Gerard Piqué, nacido el 29 de enero a las 21.54 hrs en Barcelona, España. Sasha es el segundo niño de la adorable pareja, que en 2013 dio la bienvenida a su primer hijo, Milan, quien el pasado 22 de enero cumplió dos añitos.
Shakira, considerada por la revista Forbes una de las cien mujeres más influyentes del planeta, ha traído al mundo un bebé que como ella, es del signo de Acuario. Como ella, como Piqué, como Milan. Si, una alegre familia de Acuario, bajo la original y vanguardista influencia de Urano.
Con diez años de diferencia, Piqué y Shakira nacieron el mismo día, un 2 de febrero. Gran atracción y magnetismo: “Sabía que teníamos algo. Desde el momento en que te conocí supe que teníamos algo. Nadie pensó que podía ser cierto. Hey ¿Crees? ¿Crees en el destino? Porque yo sí, como lo hice entonces, cuando tenías sólo 23”. En “23”, la canción que Shakira le dedicó a su amor, confiesa la atracción inmediata que sintió en cuanto se conocieron.
Dos soles en conjunción (mismo día de cumpleaños), que transmiten una vibración muy especial a su relación. El Marte de Shakira se encuentra en semisextil con la conjunción Venus-Urano de Piqué, mientras que el Mercurio de ella, está en semisextil con el Saturno de él. Esto señala la gran química que hay en la pareja, y la gran empatía mutua desde un punto de vista mental; en otras palabras, le resulta muy fácil a cada uno, ponerse en los pies del otro.
El amor fluye entre ambos de manera muy natural, casi podría decirse que era inevitable que estos dos se enamoraran, ¡su conexión emocional es muy fuerte!
Para Shakira, la maternidad es más importante que el éxito. Así lo indica su Luna en Cáncer en su Casa 4, la casa del hogar y la familia. Allí es donde se siente a salvo, con su pareja, con sus hijos, en su intimidad, y en donde se sien
te “en su nido”. Esta figura reconocida y admirada mundialmente, debe hacer malabares para repartirse entre lo que más ama, su familia y su carrera, pero tiene la ayuda de la incansable energía que le da Marte en Capricornio. ¿Workaholic? Posiblemente, pero con alegría y agallas de sobra para hacerlo.
La libertad de acción, la confianza mutua, tienen gran importancia en esta pareja de “uranianos”. Y es que la energía de Urano, el revolucionario, el rebelde y anticonvencional, les ayuda a sobrellevar esta relación en la que los compromisos profesionales de cada uno supondrían un obstáculo insuperable para otras parejas.
La innovación permanente, la aventura y la originalidad (viajes, mudanzas, acción), son pilares que mantienen viva la llama de esta pareja que se ha encontrado en el mundo, en el exacto momento de sincronía en que debía encontrarse. Con sus dos hijos, conforman una familia atípica, moderna, llena de originalidad y frescura.
“Siempre pensé que estaba bien, pero estaba equivocada
Eras tú esa pieza única que faltaba
Y yo podría vivir sin ti, pero no sería divertido
Te encontré y la vida fue fácil de repente
No hay preocupaciones ahoraNo hay tristezas”
Fuente: huffingtonpost.com
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