
Se ha hecho un hueco cada vez más grande en la vida de sus padres y también en sus redes sociales. Milan, hijo de Shakira y Piqué, sabe lo que es ser el centro de atención allá por donde va y parece que no lo lleva mal (aunque de vez en cuando se lleva algún disgusto ante tanta expectación y se echa a llorar). Sus enormes ojos oscuros y su pelo negro hacen que den ganas de comérselo a besos… eso es lo que hace su mamá siempre que tiene ocasión. ¿Les extraña?
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