Aunque siempre tiene una sonrisa amable y se ha caracterizado por
su sencillez, fuentes cercanas a su entorno aseguraron que Shakira es
otra persona cuando no está en público y se encuentra lejos de las
cámaras.
Los informantes indicaron que el éxito
y la fama han vuelto a la cantante una persona con mal carácter, a tal
grado que exige que la atiendan como a una reina y, además, por capricho
toma decisiones que hacen correr a todo su personal para después
cambiar de opinión.
Según allegados que
estuvieron alrededor de la colombiana en los Latin Grammy 2011, Shakira
mandó a sus colaboradores a organizar una conferencia de prensa y
después de que todo estaba listo, decidió cancelarla minutos antes sin
dar explicación alguna.
Otra fuente afirmó que
la artista no sólo es superestricta con cada detalle de su alimentación y
vestuario, sino también exige que le pongan los zapatos. De acuerdo con
el informante, todo tiene que ser como ella lo pide, porque si no hacen
las cosas al pie de la letra se enoja con mucha facilidad y les pone
mala cara. De hecho, durante la ceremonia más de 10 personas iban
alrededor de ella levantando su largo vestido para que no diera un
traspié.
También le han criticado a la
intérprete es que, teniendo tan poco tiempo viviendo en España,
prácticamente ya está perdiendo su acento neutral y más bien está
hablando como española.
Entre los desplantes de
la cantante trascendió que recientemente decidió cambiar sus vacaciones
de diciembre y no ir con su novio Gerard Piqué a Punta del Este,
Uruguay, tal como lo habían planeado, sino que ahora desea pasar esos
días en su natal Barranquilla sin novio y en familia.
Está loca sin su tigre
La
tristeza de Shakira al no haber sido felicitada por su novio Gerard
Piqué luego de ser reconocida en los Grammys, se transformó en enojo,
pues ahora ella es la que no quiere contestarle las llamadas al
futbolista. La madre de la colombiana, Nidia Ripoll, le contó a una de
sus amigas que el ibérico se la ha pasado marcándole a su hija, pero
ésta decidió que no quiere hablar con él hasta que regrese a Barcelona,
donde le pedirá explicaciones.
Pero mientras la intérprete no desea saber nada de Piqué, quien estuvo muy pendiente de ella fue su ex novio, Antonio de la Rúa.

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