La colombiana Shakira se emocionó y lloró durante el tributo
realizado hoy por la Academia Latina de la Grabación, que además de
entregarle el premio a la Persona del Año le dispensó un homenaje a
través de sus canciones más conocidas de la mano de reputados artistas
internacionales.
"Las palabras no me alcanzan para expresar mi
emoción", dijo la artista con voz entrecortada al final del evento, en
el que cantó "En Barranquilla me quedo". "Pocas veces me he sentido tan
apreciada -apuntó-. Esto no tiene precio para mí. Me han hecho la mujer
más feliz del mundo y jamás lo olvidaré".
La cantante, de 34 años,
recibió el premio de manos de Marc Anthony al término de una velada que
arrancó con la fuerza y energía de Alejandra Guzmán y Natalia Jiménez,
que interpretaron la célebre "Ciega, sordomuda" en uno de los salones
del Centro de Convenciones del hotel Mandalay Bay, de Las Vegas
(Nevada), ante unas 1.000 personas.
Después siguieron Cristian
Castro y Vicentico ("Moscas en la casa"), Franco de Vita ("No"), Pepe
Aguilar ("Que me quedes tú"), Estopa ("Te aviso, te anuncio") y Jorge
Drexler con "Devoción", un tema dedicado al compositor de esa música,
Gustavo Cerati, en coma desde hace más de un año.
El momento
álgido del acto llegó con la aparición del padre de Shakira, William
Mebarak, que cantó "Es mi niña bonita", momento en el que la colombiana
rompió a llorar para fundirse con él, instantes después, en un emotivo
abrazo, lleno de complicidades y susurros al oído.
El homenaje prosiguió con Víctor Manuelle ("Inevitable"), Alex Syntek ("Estoy aquí") y Gilberto Santa Rosa ("La tortura").
Shakira fue escogida para el galardón por su carrera musical y sus proyectos filantrópicos.
"Con
este premio redoblo el compromiso y renuevo el alma", declaró la
artista, que previamente en la alfombra roja de la ceremonia recalcó la
importancia del trabajo que realiza desde la Fundación Pies Descalzos,
volcada en niños sin recursos.
"Ver que la educación transforma las vidas de los niños y de sus familias no tiene precio", manifestó.
La
alfombra roja que precedió al tributo se alargó durante más de dos
horas en las que todos los artistas invitados se deshicieron en elogios
hacia la colombiana.
"Soy fan de ella desde que yo era un bebé",
dijo a Efe el español Pablo Alborán. "La admiro muchísimo, hoy vengo
aquí como ídolo total suyo", agregó.
Más españoles, como Shaila
Dúrcal, David Muñoz, de Estopa, Alex Ubago o Natalia Jiménez no dudaron
en alabar la trayectoria de la homenajeada.
"Admiro mucho su
personalidad, su forma de ser, su humildad, su sencillez, su alegría...
siempre tiene la sonrisa en la cara", comentó Dúrcal.
"Se merece
todos los tributos", indicó Muñoz. "No sólo es una tía guapa, sino que
tiene un talento terrible para componer. Eso lo valoramos muchísimo",
recalcó.
Por su parte Ubago subrayó la condición de la artista de "gran trabajadora".
"Lleva muchos años en esto y ha hecho cosas muy diferentes; ha demostrado ser versátil y tener un gran corazón", afirmó.
Jiménez,
que fue una de las más reclamadas en la alfombra roja y que más tarde
hizo saltar y bailar a los invitados con su interpretación de "Ciega,
sordomuda", señaló a Efe que Shakira ha abierto puertas al resto de
artistas latinos.
"Gracias a ella tenemos la posibilidad de llegar
algo más lejos, porque la industria tiene los ojos puestos en la música
latina por ella", manifestó.
Su compañera sobre el escenario, la
mexicana Alejandra Guzmán, destacó que a la colombiana "hay que
aplaudirla porque no muchas llegan tan alto".
"Escribe sus canciones, es original, es latina y es mujer; me da gusto que haya conseguido tantas cosas", declaró.
Por
último el uruguayo Jorge Drexler, que ha trabajado con Shakira en sus
dos últimos discos a la hora de elaborar las letras en español, dijo que
la colombiana no solo posee "un talento brutal", sino que "sabe lo que
quiere" y no para hasta conseguirlo con "trabajo y concentración".
No hay comentarios:
Publicar un comentario